Para comenzar este estudio, presentaremos los dos tipos de miedo: el miedo positivo, que produce «el amor de Dios» (1 Juan 5: 2-3), y el miedo negativo, que produce miedo a los hombres y a ser rechazado por la sociedad, lo que nos hace esclavos de nuestra propia carne y de las tradiciones de los hombres (Gálatas 5: 9-10 y Col 2: 8).